DESDE EL ESCRITORIO DEL PÁRROCO

Estimados Feligreses de Santa Maria:

Tal vez recuerden que estamos a mediados del "Año de San José" el cual el Papa Francisco promulgó a finales del año pasado. El Año de San José comenzó el 8 de diciembre del 2020 y se extenderá hasta el 8 de diciembre de este año. Con el fin de fomentar la devoción a San José y ofrecer una manera de crecer espiritualmente, el Obispo Jaime Soto ha invitado a los fieles a participar en una peregrinación a todas las iglesias de la Diócesis que llevan el nombre de San José. Puede estar enterado que la Diócesis tiene un buen número de parroquias llamadas "Sagrado Corazón". ¡Pero también tenemos 11 parroquias que llevan el nombre de San José! Durante los próximos seis meses, se les invita a los fieles a visitar cada una de las 11 iglesias y orar en cada una de ellas. Podemos ver dónde se encuentran las iglesias de San José y aprender más sobre la peregrinación en este enlace: https://www.scd.org/stjoseph/ journey

También es bueno saber que se ha concedido una indulgencia plenaria para aquellos que están dispuestos y han completado la oración o la práctica espiritual asociada con la indulgencia. Podemos encontrar más información sobre la indulgencia plenaria aquí: https://www.scd.org/ stjoseph/indulgence ¿Qué es una indulgencia? ¡Buena pregunta! Una indulgencia es una remisión de castigo temporal, o consecuencias, debido al pecado. El pecado tiene consecuencias las cuales son eternas y temporales. Jesús ha sufrido las consecuencias eternas de nuestros pecados al morir en la cruz. Él pagó el precio por nuestras consecuencias eternas. Jesús asumió el castigo de nuestros pecados, a pesar de que estaba completamente libre de culpa. Aún así, los pecados tienen consecuencias. Con indulgencias, la Iglesia nos dice que “sabemos que te has desviado y queremos darte algo para ayudarte a encontrar el camino a casa, para ayudarte a sanar". Podemos hacer que nuestros pecados sean perdonados a través del Sacramento de la Confesión, pero incluso después de ser perdonados de nuestros pecados todavía hay algo de "rehabilitación espiritual" que necesita pasar. Cualquier rehabilitación que no hagamos en esta vida, se nos da la oportunidad, y el regalo, de completar nuestra rehabilitación y purificación final en el Purgatorio. En Su misericordia, Dios creó el Purgatorio para que pudiéramos estar completamente preparados para disfrutar de la dicha del Cielo.

Otra forma de entender las indulgencias es forma de analogía. El Padre Mike Schmitt explica que, si me desgarro el músculo del hombro, puedo tratar de reparar la lesión a través de la rehabilitación física. Pero si el dolor persiste, y el hombro no mejora, necesito ir a un médico para que quirúrgicamente repare el hombro. El médico completa la cirugía, pero todavía tengo que hacer rehabilitación para sanar por completo. El médico me dice: "Haz estos ejercicios y te curarás". Una indulgencia es como decir: "Haz estos ejercicios y fortalecerán tu alma". Por lo general, para cumplir una indulgencia, uno debe de hacer lo siguiente: orar por el Papa, ir a la confesión, recibir la Eucaristía, decir una oración u oraciones y / o hacer una peregrinación y orar, ayunar y dar limosna. Recuerde que una indulgencia es "extra-sacramental", lo que significa que uno se beneficia de la gracia de la indulgencia al ser ya un católico practicante, en buen estado y estar en estado de gracia. Por cierto, el 18 de junio, Bob Dunning de "The Bishop's Hour" (La Hora del Obispo) en la radio católica (AM 1620) y yo hablamos sobre el entendimiento católico de las indulgencias. A pesar de que puede haberse perdido el episodio en la radio, uno puede escucharlo en Apple Podcasts. También encontrará en el mismo episodio, una discusión sobre las peregrinaciones católicas que Bob y el Padre George Snyder tuvieron.

¡Que tengan una muy bendecida semana!

En Cristo,

P. Berg

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