DESDE EL ESCRITORIO DEL PARROCO

Estimados Feligreses de Santa María,

            Hace algún tiempo, el Padre Steven Wood y yo hablamos sobre ocasionalmente presentar algo en el boletín, cuando uno de nosotros recalcaríamos un podcast, sitio web, libro, video, película o algún otro medio el cual nos pueda ayudar a crecer en la fe católica.  He mencionado de vez en cuando un sitio web llamado "The Catholic Thing" (TCT).  (www.thecatholicthing.org)  TCT es supervisado por Robert Royal, a quien pueden haber visto en EWTN. El Sr. Royal y el Padre Gerald Murray forman el "posse papal" el cual sale de vez en cuando en el programa de los jueves por la noche de Raymond Arroyo llamado "The World Over Live".  Recibo un artículo todas las mañanas de TCT en mi correo electrónico.  No siempre leo la contribución, pero he descubierto que cuando leo uno de los artículos, generalmente aprendo algo que aún no sabía. Recientemente, leí un artículo del Padre Jerry Pokorsky. El Padre Pokorsky es un sacerdote de la Diócesis de Arlington (Virginia) a quien había visto a mediados de octubre cuando estaba en esa parte del país para un Simposio de Planificación Familiar Natural organizado por la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos.  No conozco muy bien al Padre Pokorsky, pero lo conozco lo suficientemente bien como para saber que tiene un sentido del humor pícaro.  Cuando me reuní con él en octubre, la ocasión fue una cena de unos 7 u 8 sacerdotes de Arlington en la rectoría de un amigo sacerdote en McLean, VA.  En un momento de la cena, el Padre Pokorsky y otro sacerdote se turnaban para contar chistes que nos mantenían bastante entretenidos. Siempre he admirado a un buen (y, sí, limpio) narrador de chistes, porque yo no puedo recordar los chistes en lo absoluto.

            Bueno, hablemos del artículo del Padre Pokorsky del 4 de diciembre de TCT. El artículo se titula: "Apropiarse de los Apropiadores de Navidad" y la premisa principal es que vivimos en un momento en que hay una tendencia a eliminar de nuestra cultura cualquier cosa que pueda ser remotamente cristiana.  El Padre Pokorsky señala que no parece correcto que los ateos hagan dinero con la Navidad y luego se den la vuelta y etiqueten a los cristianos como intolerantes.  Él escribe (irónicamente): "No tengo ningún problema con que los ateos ganen dinero honesto con la Navidad. Pero cuando una cultura atea saca provecho de Jesús mientras impugna a sus seguidores como intolerantes y odiosos, es hora de levantarse y, bueno, reclamar el estatus de víctima".

            El Padre Pokorsky enumera algunos ejemplos de elementos de la Navidad de temática cristiana cuyo verdadero significado ha sido oscurecido por nuestra cultura secular:

1. Árbol Navideño: Con sus ramas de hoja perenne, el árbol de Navidad señala a Jesús que nos da vida eterna.  Además, el árbol de Navidad recuerda a los cristianos de Cristo en la cruz que fue clavado en la madera de un árbol. 

2. Corona Navideña: La corona circular simboliza a Dios, el Principio y el Fin de todas las cosas. 

3. Encino: Con sus hojas puntiagudas, el encino simboliza la corona de espinas que Jesús usó durante su Pasión. Las bayas representan las gotas de sangre de nuestro Señor mientras Él se dirigía a la cruz.

4. Luces y velas Navideñas: Nuestras luces de Navidad apuntan a Cristo, nuestra luz.

5. Estrella del árbol Navideño: La estrella nos recuerda a la estrella que guía a los reyes magos a la ubicación de la Sagrada Familia. 

6. Bastones de menta: Estos dulces caramelos nos recuerdan el bastón que llevaban los pastores que estuvieron entre los primeros testigos del Rey recién nacido. 

Les remito al artículo del Padre Pokorsky para el resto de los ejemplos que da.

           Si bien el artículo del padre es algo irónico, concluye con algunos consejos muy buenos:

Mientras tanto, durante el Adviento, los cristianos pueden continuar preparándose para el cumpleaños de nuestro Salvador con una buena Confesión y prácticas penitenciales ligeras: "Preparen el camino del Señor, enderecen sus senderos." (Lc. 3:4)  En medio de una cultura dura, estéril, intolerante y fea, adornemos los santuarios de nuestros templos y hogares con los símbolos de la Navidad:  luces parpadeantes, ramas perennes, dulces y regalos: los recordatorios de Jesús y la dulzura de los Evangelios. El día de Navidad, reunamos alrededor del árbol de Navidad decorado y el Nacimiento y cantemos himnos de paz y alegría…  Si es necesario, incluso agregue el álbum Navideño  de Elvis.

            ¡Amén hermano!   ¡Bendito Adviento a todos ustedes!  

En Cristo,

Padre Berg     

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